lunes, 12 de noviembre de 2007

A Madrid a pasarla toledana

Hallábanse vuestras mercedes la noche que va entre venus y saturno
asistiendo a la actuación de esos insignes comediantes y músicos
llamados Skatalites, cantando y bailando y empinando los codos,

y si echáronme en falta no se crean que estuve ocioso, que yo bien
estuve haciendo lo mismo en el Madrid de los Austrias, que aquí somos
todos hidalgos y cristianos viejos, y si tiro de linaje yo me remonto
hasta los godos.

Pues bien, mientras unos estaban por disfrutar de vino, música y
chanzas en Sevilla, lo mismo me disponía yo a hacer en Madrid por
partida doble, el viernes viendo a Y&T (Yesterday & Today) y el
sábado a Stryper, y en medio una noche toledana de las que hacen
afición. Que para el que no lo sepa, le dejo unos versos a los que
fueron dando vueltas hasta surgir de mi cabeza mientras hacía tiempo
por la tarde expectante ante lo que tendría que venir, fruto de mi
novedoso interés por la poesía y el Siglo de Oro:

Es la noche toledana
la de no plantar oreja
y sólo oler la cama
al guardarse la corneja:
ya entrada la mañana.

En fin, que allá que iba yo a ver, primero, a ese pedazo de grupo
con ese pedazo de cantante y ese pedazo de guitarrista, que a pesar de
todo no alcanzaron nunca el reconocimiento general o mediático que se
merecen por culpa de (o gracias a) lo que en su día significaron Judas
Priest o Iron Maiden, épocas del auge compositivo de esta banda llamada
Y&T.

El concierto tenía lugar en la Sala Heineken,
en el centro de Madrid, adyacente a un extremo de la Gran Vía y junto a
la Plaza de España (que es un parquecillo que no está mal pero, para
qué engañarnos, da pena el nombre que tiene porque uno inmediatamente
lo compara con tamaña belleza de Plaza de España que tenemos aquí en
Sevilla.

Como pasa a veces con los conciertos en esa sala, la verdad es que
se quedó un poco pequeña. La sala en cuestión no está mal, pero hubo
mucha gente que compró entrada en taquilla y claro, no están las cosas
como para tomar muchos riesgos a la hora de promover conciertos y
alquilar salas.
Pero bueno, el concierto fue excelente, de principio a fin. Uno no se
espera que Meniketti
aún tenga esa pedazo de voz, y mucho menos que la sostenga de principio
a fin, pero eso es lo que hubo. Encima es todo un virtuoso de la
guitarra y el resto de la banda no se le quedaba muy atrás.

Fue un concierto muy divertido, con un sonido estupendo, y fue
genial revivir esos temazos que tienen. Si no conocéis la banda o no
queréis meteros en camisa de once varas, os aconsejo recopilatorio
"Best of 81 - 85" para escuchar sus canciones más emblemáticas y el
directo "Open Fire: Live" para saber cómo suenan hoy día. Como
aperitivo, os dejo este video:



La anécdota del concierto fue encontrarme allí a Willy Toledo pasándoselo como un enano.

En fin, luego tocaba reunirse con conocidos, conocer nueva gente y ver qué se cuece en la noche madrileña. No es que haya muchos sitios heavies, sin embargo hay uno en el que hay muchos bares: son los Bajos de Argüelles y allí también hay pubs de otro tipo pero es que hay MUCHOS
bares heavies. Y claro, precisamente como es donde van todos los
heavies, me encontré con gente que conocía de otras partes de España
con los que no había contado verme, al menos hasta el concierto del día
siguiente. El mundo es un pañuelo. Bueno, os podéis imaginar lo que
hubo: corrió la cerveza (me moló ver que tenían Paulaner, que quieras
que no es de las extranjeras de las más conocidas pero no es típica de
garitos tampoco), el calimocho, los chupitos, y encima la mitad fue de
gratis, que llegado un punto en un bar que no era de los heavies la
camarera empezó a enrollarse (sin segundas) que no estaba el jefe y
allí el grupito de heavies con el que me había juntado parecía dueño
del local.

Y ya llegó la mañana, que por cierto no os quejéis de frío que
comparado con Madrid lo de aquí no es nada, y hala, a dormir que son
dos días. A mediodía tocaba levantarse, empezar a recoger gente
(primero mi compi de todos los conciertos, "Migue", que se tuvo que
perder el de la noche anterior), luego otros de Cádiz, que si ir al
lugar del concierto y encontrar ya la gente de Jaén, Murcia, Cartagena,
etc, y hacer tiempo. por los bares de alrededor.

La sala del concierto era la sala-teatro Joy Eslava,
en pleno centro de Madrid, que claro, en sábado por la tarde estaba a
reventar de gente que iba de compras y tal. Para que os hagáis una
idea, si hubiera sido Sevilla habría sido la calle Sierpes, aunque esta
era el doble de ancha, claro. Para la gente debía ser un espectáculo
ver tanto heavy junto, en la puerta de una discoteca harto pija además.
Pero mejor era cuando se acercaba alguien, ya curioso por la estampa, a
aquel grupo de tiparracos con chupas de cuero, pantalones rotos, o
mallas amarillas y negras, faldas cortas y pelos cardados y al
preguntarte veías la cara que ponía al decirle que todos esos iban a
ver un grupo de Heavy Metal Cristiano.

Sí, eso es. Temedme porque a partir de ahora voy a evangelizaros.
Guardarme el secreto, pero yo no soy cristiano viejo como decía al
principio, sino que estoy recién converso pero planeo llevar la Verdadera
Religión a los infieles como vosotros, so pena de Garrote. Bueno, como apunté antes, el grupo era Stryper,
que para el infeliz que no los conozca es un grupo del copón cuyas
letras son de contenido cristiano, bien directamente religioso hablando
de Dios (cuyo nombre no diréis en vano) o Jesús o de los valores cristianos positivos que en buena medida son los de el resto de religiones y la ética general.
Sea como fuere, a quien no le gusten esas letras no tiene más que no
echarles cuenta, o pasar de todo y volverse con sus herejías infantiles
de dragones y caballeros, espadas y brujas. En fin, el punto más gracioso sobre este grupo es que son de California, y estaban por Los Ángeles en la misma época en que Blackie Lawless y W.A.S.P. escandalizaban a las buenas y castas gentes de aquella ciudad con sus obscenidades y tirando carne cruda en los conciertos.
Estos lo que tiran son Biblias. Sí sí, los Sagrados Escritos, y por
supuesto se preocupan en conseguirlos en Español. Y al final del
concierto, aunque esta vez no lo hicieron (de las tres veces que los he
visto sólo lo hicieron una vez), hacen una oración y bendicen al
público.

En cuanto al concierto en sí fue muy bueno. El sonido fue genial,
los tíos son buenísimos, el cantante, las guitarras, los coros... el
batería que está medio pirado es la tralla y siempre toca con la
batería apuntando hacia su izquierda. Lo malo fue que duró algo menos
de hora y media, probablemente influidos por el inusual retraso del
concierto (y digo inusual porque en Madrid si se retrasa algo cinco
minutos la gente ya silba, no como aquí que nos tenemos que joder) y
que la discoteca pija aquella tendría que sacar pasta como todos los
sábados.

Pero estuvo genial y me lo pasé de muerte (y resurrección). En fin,
para los que no los conozcáis y tengais curiosidad, aparte del enlace
anterior, tomad este video como aperitivo:



Podéis pillaros también cualquiera de sus primeros discos, de los
años ochenta, aunque por aquel entonces sonaban un poco light, así que
recomiendo que después de echarles un vistazo, os quedéis con su DVD "Stryper Greatest Hits: Live In Puerto Rico".

Los teloneros eran un grupo español llamado Sacred, que no estaban mal, sobre todo el cantante era bastante bueno, aunque ellos parecían un poco apáticos en el escenario, poco más que si estuviesen en un ensayo

Bueno, después del concierto ya había que pillar el metro y el viaje
de vuelta, si bien me quedé con ganas de no haber comprado el billete y
poder volverme ya el domingo por la tarde, pero otra vez será. Así no
me empacho y puedo volver a Argüelles otro día, o visitar la Sala Excalibur, en Vallecas, que es el Templo del Heavy en Madrid, una discoteca que abre hasta la mañana.

Bueno, hasta mi próxima aportación (espero que os haya gustado mi estreno), nos leemos por aquí y en los
comentarios. Sed buenos, respetad al prójimo, honrad a vuestros padres
y madres, no matéis ni robéis, follad sin condón que si no es pecado y
que Dios os guarde. Hacedme caso u os denuncio al Santo Oficio.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

vaya , si que te has estrenao, ya veo ya. la madre que te pario has colapsao la página. has desplazado mis ENTRADAS hasta las profundidades!!!!!

pero está de puta madre la crónica oye. bien escrita. se lee bien. No sabía yo de tus dotes literarias.
esperemos que lo lea más gente.

Mónica Dämmerung, A dijo...

niño envidiable, he dicho! Y el parche de Stryper!!?! jaja

Anónimo dijo...

güenisimo el texo, largo de cojones, pro mu güeno, al menos el principio, q es lo unico que me entretenio en lee, ya lo terminare mas tarde. nos vemos. aupa rockers

Anónimo dijo...

ese koper !! komo tas kurrao esto la ostia... un saludo desde BCN pa to la gente wena. ke valla bien por alli.

VIVA EL PUNK VIVO O MUERTO!!

Anónimo dijo...

eeeeeh!
ese alex!!!!!
me alegro de escucharte (de leerte)
SI EL PUNK HA MUERTO
DECIDME DONDE ESTOY ENTERRADO!!!!!